¿Cómo está afectando la cosmética al cambio climático?

El cambio climático es uno de los problemas más críticos que enfrentamos en la actualidad, y cada industria juega un papel en su impacto, incluida la cosmética. Aunque puede no parecer evidente a primera vista, la producción y el consumo de productos cosméticos tienen efectos directos en el medio ambiente. Desde la extracción de ingredientes hasta el empaque, transporte y desecho de los productos, la cosmética está involucrada en una cadena que influye en las emisiones de carbono y el calentamiento global.

La industria cosmética tradicional ha sido responsable de generar una considerable huella de carbono debido a varios factores clave:

Uso de Plásticos y Empaques No Sostenibles: El empaque de los productos cosméticos, generalmente hecho de plásticos de un solo uso, representa un gran problema. Estos plásticos tardan siglos en degradarse, liberando microplásticos que afectan los ecosistemas marinos y terrestres. Además, la producción de plástico implica el uso de combustibles fósiles, que contribuyen directamente al calentamiento global.

Emisiones en la Producción y Transporte: La fabricación de productos cosméticos requiere de energía, agua y, en algunos casos, productos químicos que son perjudiciales para el medio ambiente. El transporte de estos productos, desde fábricas hasta tiendas y consumidores finales, también genera una importante cantidad de emisiones de CO2.

Ingredientes dañinos para el ecosistema: Algunos ingredientes utilizados en cosmética convencional, como microperlas plásticas y derivados del petróleo, no solo son perjudiciales para la piel, sino que también contaminan los océanos y su fauna. Estos ingredientes no se degradan fácilmente y pueden acabar en ríos y mares, afectando negativamente la biodiversidad.

Testeo en animales y falta de transparencia: La falta de regulación en algunas regiones del mundo permite que ciertas marcas continúen con prácticas poco éticas, como el testeo en animales, lo cual no solo es un problema ético, sino que, a menudo, estas prácticas están vinculadas a procesos industriales más contaminantes.

Estamos profundamente comprometidos con minimizar el impacto de nuestros productos en el medio ambiente, adoptando medidas sostenibles en cada etapa de nuestra cadena de producción.

Empaques sostenibles: Nos hemos propuesto reducir el uso de plásticos y hemos adoptado empaques reciclables y biodegradables. Al elegir materiales más sostenibles, como cartón reciclado y envases reutilizables, contribuimos a disminuir la cantidad de residuos que terminan en los vertederos y océanos.

Fórmulas naturales y libres de tóxicos: Apostamos por fórmulas naturales que son saludables para tu piel y para el planeta. Utilizamos ingredientes derivados de plantas, libres de parabenos y sulfatos, lo que asegura que nuestros productos no afecten los ecosistemas ni tu bienestar. Esto reduce la cantidad de químicos dañinos que llegan al agua y el suelo.

Cero testeo en animales: Nos enorgullece decir que Jessica Cosmetics es una marca 100% cruelty-free. Rechazamos firmemente el testeo en animales y trabajamos solo con proveedores que comparten nuestra ética en este tema. Creemos que la belleza no debe venir a costa del bienestar animal o del medio ambiente.

Producción responsable y energía limpia: Estamos invirtiendo en procesos de producción más responsables, utilizando menos agua y buscando reducir nuestro consumo energético a través de fuentes de energía renovable. Al disminuir nuestras emisiones de carbono, buscamos ser una marca consciente de los desafíos ambientales.

 

El Futuro de la belleza sostenible

Nuestro compromiso con el medio ambiente no termina con nuestros productos. Nos esforzamos constantemente por innovar y encontrar nuevas formas de ser más sostenibles, tanto en nuestra producción como en la relación con nuestros clientes. Sabemos que el cambio climático es un reto global y que solo podremos enfrentarlo si trabajamos juntos.

Estamos comprometidos con ofrecerte productos de la más alta calidad, cuidando de ti y del planeta. 

Haz de tu rutina de belleza una herramienta para combatir el cambio climático.